¿Te supera el desgano? Aprende a manejar la falta de energía

La mitad del año es una época complicada porque muchas veces la energía se nos agota. Si a eso sumamos que el invierno no lo hace más fácil, la situación empeora. Lo primero para saber combatir este desgano es identificarlo. Esto quiere decir descubrir cuál es su origen.

Existen tres razones por las que la fatiga nos puede visitar:

Cansancio

Si eres de las personas que hacen 5.000 cosas por días y el fin de semana en vez de descansar aprovechas de dedicarte a todo aquello que te quedó pendiente, déjame decirte que eres humana. El día tiene solo 24 horas, así que no intentes ser la superhéroe de nada por el estilo, porque la más perjudicada serás tú. Si ya descartaste tener desgano por alguna razón de salud y la única respuesta a tu cansancio son tus ganas de tareas extra. Trata de organizarte mejor y regálate un fin de semana abrazada a tu almohada.

Aburrimiento

Si los distintos ámbitos de tu vida están bien y así y todo te falta energía, puede que tu desgano se deba al aburrimiento, un sentimiento muy típico en los tiempos de hoy. Si cada vez que haces algo buscas obtener un beneficio inmediato y cada vez es más corto tu tiempo de satisfacción, es momento de revisar qué pasa en lo profundo que te aburres tan rápido. Quizás tienes dificultad para manejar la ansiedad y la frustración.

Desmotivación

Si tu desgano no pasa por un tema de salud y va mucho más allá, seguro lo tuyo se debe a la desmotivación. Esta suele estar relacionada con tener una sensación de estar a la deriva, sentir que la vida no tiene un sentido o un objetivo, o también que te da todo lo mismo. La desmotivación lleva a la mediocridad, inevitablemente. Lo bueno es que está en ti repararlo. Probar distintas actividades hasta encontrar una pasión es la mejor forma de encontrar un nuevo motor en tu vida. Aunque al principio parezca forzado, hazlo. ¡Será tu salvación!