Cristián Campos cuestionó el respaldo de sus hijos a Raffaella: "Le contó cuando nosotros estábamos trabajando juntos"

En una polémica entrevista, el reconocido actor Cristián Campos abordó los turbulentos acontecimientos que han sacudido su vida familiar tras las acusaciones de abuso sexual en su contra por parte de su hijastra Raffaella Di Girolamo. Con un tono desafiante, Campos no solo negó rotundamente los cargos, sino que apuntó sus dardos hacia sus hijos Antonio y Pedro, quienes se han distanciado de él en apoyo a su hermanastra.

Según el relato de Campos, todo se desencadenó cuando Raffaella comenzó a denunciar presuntos abusos en los diversos lugares donde él trabajaba, lo que eventualmente llevó a la ruptura de sus relaciones laborales, incluyendo con su propio hijo Antonio, quien dirigía uno de sus monólogos.

"Fue a fines del año antepasado cuando Raffaella le informó a mi hijo Antonio que no podía trabajar conmigo porque yo la había abusado cuando era niña", reveló Campos con evidente consternación.

El actor aseguró que las acusaciones de Raffaella también obstaculizaron su trabajo en el Teatro Zoco, donde ella supuestamente convenció al director artístico de que él era un "abusador". Sin embargo, Campos encontró consuelo en palabras de personas "más sabias" y cercanas a él, quienes le explicaron que la reacción de sus hijos es "natural" debido a la presión de su "generación millennial" y su devoción a causas de género y defensa de minorías.

"Me dicen: 'Ellos son millennials, ellos se deben a su tribu'. Esa generación, con la que ellos trabajan, es muy reactiva a todos los temas de género, a la defensa de las minorías. Es la generación que inventó el 'macho violador'", citó Campos, intentando justificar el distanciamiento de sus hijos bajo el argumento de que no pueden ir en contra de la "supuesta víctima", en este caso, su hermanastra.

No obstante, el actor cuestionó la falta de consistencia en el apoyo de Antonio y Pedro a Raffaella, calificándolo de "más testimonial" y "generacional". Expresó su confusión ante el hecho de que no hayan buscado proteger a su otra hermana menor, fruto de su relación con María José Prieto.

"Esa es la reacción lógica que se me ocurre. O sea, levantar la mano o llamar a mi mujer y decirle: 'María José, ojo, que acabamos de descubrir que Cristián es abusador. Cuida a nuestra hermana'. Es lo lógico. Pero ellos no hacen eso. Ellos hacen todo lo contrario. Se alejan en silencio y nos cancelan a todos, no es consistente", lamentó Campos.

En un giro inesperado, el actor también sembró dudas sobre la veracidad de los "síntomas de una mujer abusada" que, según sus hijos, presenta Raffaella.

"Yo pienso, ¿qué síntomas tengo yo de abusador? ¿Qué síntomas ven ellos de abusador en mí después de una vida juntos?", se preguntó, desafiando las afirmaciones de sus propios hijos.

A medida que la controversia se profundiza, queda claro que la batalla legal y emocional entre Cristián Campos y su hijastra Raffaella Di Girolamo está lejos de terminar. Con sus hijos atrapados en el fuego cruzado, el actor ha optado por una estrategia defensiva que mezcla negación, cuestionamientos generacionales y una súplica velada por la reconciliación familiar.