[COLUMNA] Constanza Del Rosario: ¿Tu relación es como la fábula de la hormiga y la cigarra?

Por Constanza Del Rosario @ConsdelRosario | Miércoles, 15 de Febrero de 2017
[COLUMNA] Constanza Del Rosario: ¿Tu relación es como la fábula de la hormiga y la cigarra?

Si hay algo que no me ha dejado de sorprender en mi experiencia terapéutica es la cantidad de parejas que están conformadas por una hormiguita y una cigarra, es decir, por dos personas que tienen diferentes filosofías sobre la diversión y el trabajo; una centrada en invertir en el futuro y otra en vivir el ahora. Como en el siguiente ejemplo:

Él: En verdad que no la entiendo, la sorprendo con unos pasajes a Cancún y en vez de entusiasmarse se molesta y me critica.

Ella: ¿Cómo no me voy a estresar? ¡Si él cree que de un día para otro yo me puedo subir en un avión! Marzo es un mes de locos en la oficina y lleno de gastos. Y para colmo ¡Ni siquiera piensa en la entrada al colegio de los niños!

Él: ¿Qué hay de malo con que falten las primeras semanas al colegio? Además, para Marta nunca hay una buena fecha para salir de vacaciones, es una adicta al trabajo. No sabe divertirse.

En el ejemplo que les presento, él es una cigarra y ella una hormiguita y los llamo así a partir de la fábula "la hormiguita y la cigarra" que probablemente muchos escucharon de niños ¿La recuerdan? Para los que no conocen, de forma resumida, consistía en la historia de una hormiguita que durante el verano se dedicaba a recolectar comida para el invierno, mientras su amiga cigarra se dedicaba a cantar y divertirse. Al llegar el invierno la cigarra no tenía qué comer ni donde refugiarse y termina siendo acogida por su amiga hormiguita, quien disfrutaba en la comodidad de su hogar, gracias a haber sido precavida y trabajadora.

Como en la fábula, las personas hormiguitas o que invierten en el futuro, suelen aplazar la diversión hasta haber cumplido todas sus responsabilidades y les resulta difícil relajarse y disfrutar cuando hay tareas pendientes o inminentes; ya que su mayor temor es que la vida se vuelva adversa o inestable por no cumplir con éstas.

¿Qué esperan las hormiguitas de sus parejas? Que como ellas trabajen duramente, sacrificando el presente para tener un futuro libre de deberes y por lo tanto de ansiedad y así sentirse libres para disfrutar. ¿Qué pasa cuando se emparejan con una cigarra? Suelen sentirse los adultos de la relación y critican a su pareja infantil, inmadura e incapaz de postergar la gratificación; sintiendo que cargan solas con toda la responsabilidad.

Por el contrario, las personas cigarras o que viven el momento son personas que creen que lo primordial es disfrutar la vida. Su lógica es que siempre habrá trabajo por cumplir y que si esperamos disfrutar la vida cuando todas las responsabilidades sean cumplidas, se perderán los buenos momentos. Su filosofía facilita que dejen para mañana lo que podrían hacer hoy o que la posibilidad de divertirse los haga tomar decisiones impulsivas; esto ya que su mayor temor es caer en una vida monótona, desperdiciada en preocupaciones. ¿Qué esperan las cigarras de sus parejas? Que su pareja viva el presente y que no deje para más tarde siempre, la diversión y el placer. Que "disfruten ahora y paguen después". ¿Qué sucede cuando se emparejan con una hormiguita? Que la juzgan de grave y aburrida; sintiendo que su pareja "les corta las alas", adoptando una actitud de "adolescente rebelde frustrado" que termina cargándole la mano a la pareja por su impulsividad o su procastinación.

Quizás se preguntaran ¿Por qué se empareja una hormiguita y una cigarra? Y más aún ¿Es posible un futuro juntos?

Generalmente una hormiguita y una cigarra se eligen, de modo inconsciente, para aprender algo el uno del otro; para equilibrar la propia personalidad. Claro está, en la medida que ambos están dispuestos a flexibilizar sus posiciones y ver las virtudes de la filosofía del otro. ¿Qué puede aprender una cigarra de una hormiguita? A ser más organizada, pragmática, responsable y estratégica, sin por ello sacrificar el placer, sino que utilizando su tiempo de forma más efectiva. ¿Y una hormiguita de una cigarra? A aprender a soltar el control, ser más optimista, confiada y menos autoexigente, convirtiéndose en alguien altamente eficiente que es capaz de soltar "la pega" para disfrutar sin culpa.

En definitiva, una hormiguita y una cigarra pueden llegar a formar un gran equipo si en vez de mirarse de forma crítica, se apoyan mutuamente frente al deber y la diversión. Ya que, en las parejas como en la selección nacional, grandes cosas se pueden lograr si trabaja en equipo un Alexis Sanchez y un Gary Medel ¿No lo creen?

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