Este es el culpable de que no puedas parar de comer

Sobre gustos no hay nada escrito, y así como unos caen en la tentación de lo dulce, para otros es lo salado lo que los vuelve locos. Lo mismo pasa con lo amargo y con lo ácido. Pero si te hablamos de "Umami", puede que no tengas respuesta, y lo más probable es que a todos les guste. 

El Umami es el llamado "quinto sabor", y es aquello que relacionamos con lo sabroso o delicioso. Así como esas papas fritas que tanto te gustan, o la pizza que no tienes palabras para definir. 

Aunque no lo creas, el Unami existe hace un siglo y los científicos japoneses lo descubrieron. Además, revelaron que nuestras papilas gustativas enloquecen con aquellos alimentos que contienen Umami, o bien, que son ricos en glutamato, ya que es justamente su aminoácido glutámico lo que nos provoca el catalogarlos como sabrosos. 

Lo reconocerás porque son esos momentos en que no puedes decidirte entre dulce, amargo, salado o ácido, sino que más bien algo indescpritible que responde simplemente a delicioso, aumentanto tu salivación. 

Fue Kikunae Ikeda de la Universidad Imperial de Tokio, el japonés que lo bautizó con ese nombre en 1908. Y el primer alimentó que detectó lo tenía fue el alga Kombu o la seta Shiitake. Sin embargo, no aplica solo a la comida asiática. 

El jamón, las anchoas, el tomate y el queso también provocan en el paladar la misma percepción al ser combinados con otros alimentos al cocinar. La salsa de soya, por ejemplo, también tiene glutamato, y combinada con otros alimentos saca lo mejor de estos, añadiendo ese sabor umami. 

Evidentemente la industria alimenticia está al tanto de esto, y creó un aditivo que activa en nuestras papilas, haciendo que no podamos dejar de comer ciertos alimentos que, generalmente, son comidas procesadas, como las papas fritas con ketchup o una ensalada con salsa César. 

¿Cómo saber si estás expuesta a caer bajo su efecto hiptnótico? Busca en las etiquetas aditivo E-621, también aparece como proteína texturizada, alimento para levadura, gelatina, nutriente de levadura, concentrado de proteína de soya o "potenciado del sabor". 

Kikunae Ikeda es también el famoso creador de la "sal china", ajinomoto o glutamato monosódico, muy utilizados en los restaurantes orientales. 

Su consumo en exceso puede provocar convulsiones, dolores de cabeza, excitación del sistema nervioso, sudoración, mareos, enrojecimiento cutáneo e, incluso, se relaciona con la obesidad y esterilidad femenina. 

Por esta misma razón hoy se encuentra bajo la mira intensiva de los expertos, y es que aún siendo "basura" vuelve loco a todos.