Nuevo estudio de Harvard revela la cantidad máxima diaria de sal saludable

Un nuevo y reciente estudio de la Universidad de Harvard ha revelado la cantidad precisa de sal que deberíamos consumir a diario. Según este informe publicado el 8 de agosto de este año en el Journal of the American College of Cardiolog, solo se pueden consumir dos cucharaditas al día.

Sin embargo, para la OMS, el consumo diario máximo sigue siendo 2 grs al día, una cucharadita. Ahora bien, los expertos que realizaron el estudio aclaran que fue realizado en 2.996 personas con una edad promedio de 49 años, y de las cuales el 54% padece hipertensión. Y que los resultados demostraron que al superar esos 3,7 grs al día se aprecia un cambio a nivel cardíaco que se traduce en una peor tensión arterial sistólica una mayor velocidad diastólica.

Pero al mismo tiempo explican que estos cambios son aplicables justamente a aquellos pacientes hipertensos. "El alto contenido de socio en la dieta podría no causar tensión miocárdica y velocidades anormales; más bien, puede ser un marcador para un paciente de alto riesgo con malos hábitos alimenticios en general".

Según los cardiólogos, un cuerpo sano tiene los mecanismos fisiológicos para poder regular un aumento en el consumo de socio y los problemas que derivan de esto como la retención de líquidos, el aumento del espacio intravascular y el aumento de la tensión arterial. Pero afirman que el problema se produce cuando dichos mecanismos fallan, y es ahí cuando se debe restringir la sal para no sufrir las consecuencias.

Y el factor determinante en esta falla es el paso del tiempo. Con la edad la tensión arterial puede subir y esto es lo que nos fuera a restringir la sal, ya que se produce un endurecimiento fisiológico de las arterias (arteriosclerosis), que provoca el aumento de la presión. De esta forma, si nuestra presión es de más de 130 sobre 80, se debe prestar atención, recomiendan los especialistas.

Puede ser que el salero sea uno de nuestros principales enemigos, pero no el único, los alimentos en conserva, las aceitunas, embutidos, mariscos y papas fritas, entre otros, tienen una elevada cantidad de sal que pasa desapercibida al estar más "disimulada".

Si bien con los avances hoy tenemos medicamentos que pueden ayudar, y los doctores resultan algo más tolerantes por lo mismo, el reducir la ingesta de sal parte desde la casa y el éxito depende de nosotros mismos.